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Madonna della Candeletta (Para agrandar la imagen pinche encima con el ratón) |
Campanitas de Belén,
tocad al Alba, que sale
vertiendo divino aljófar
sobre el Sol que de ella nace,
que los ángeles tocan,
tocan y tañen,
que es Dios hombre el Sol
y el Alba su madre.
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Sí señores, ya sé que este mismo cuadro de Crivelli lo envié felicitando las Pascuas en 2015. Pero es tan hermoso que merece la pena repetirlo.
ResponderEliminarLo es. Desde la pequeña vela a los damascos, las frutas...Todo sugiere armonía y frangancia. Este cuadro huele a mermelada recién hecha, a cera virgen recién fundida y a pan tierno.
EliminarFeliz Navidad, don Santiago...preciosa selección. No importa la repetición.
EliminarSí, tiene además todo el decoro y la opulencia veneciana.
EliminarY la melancolía de casi todas las pinturas de la Virgen y el Niño. Ambos y en especial María, tan seria, saben el final cruel y glorioso. Acabo de mirar las ilustraciones navideñas de los quince años pasados en esta bitácora y compruebo que la Virgen nunca sonríe y el Niño rara vez.
Felices Pascuas para usted y los suyos don Santiago, y para todos los que aquí nos citamos.
ResponderEliminarDavid
Felices Pascuas.. Don Santiago.. Juan viejo
ResponderEliminarFelices Pascuas estimado y respetado señor. Reciba todo mi afecto y gratitud infinita. J.G
ResponderEliminarQuerido Santiago, precioso y singular el Crivelli. Gracias
ResponderEliminar¡Feliz Nochebuena y día de Navidad!
Le deseo, don Santiago, un maravilloso Día de Navidad; deseo que extiendo a todos los que por aquí llegan para leer y comentar, a todos llene de alegría el Nacimiento de Nuestro Señor y Salvador.
ResponderEliminarY añadiré una felicitación a don Santiago por el buen juicio, digo juicio mejor que gusto, de recordar a Crivelli, venetus como él gustaba de firmar. La Brera fue una ocurrencia de los afanadores gabachos pero yo la encuentro disculpable, quizás las tablas de Crivelli no se hubieran salvado del olvido de otro modo, el pobre estuvo muy poco considerado.
Y otra felicitación que añado, por don Lope de Vega; me ha obligado usted a visitar Pastores de Belén, ¿qué mejor momento que éste para hacerlo?
Y mientras nos quede Lope de Vega y un par de cosas más, para qué atormentarse con las miserias que nos persiguen.
Desde Vizcaya, en la viejísima Castilla, muchas felicidades.