El nacimiento de Venus (1483) de Botticelli. Galería Uffizi, Florencia. |
Ombligo de Venus, Piedemonte Segoviano, 26 Nov. 2018 |
Planta modesta con nombre glorioso. Según Hipócrates, buena para procrear varones. Este año la diosa obró el milagro: ayer, muy al borde del invierno, al pie de las vallas de piedra aparecieron miles de tiernos ombligos.
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Los dioses forestales no se manifiestan a las multitudes vestidas con chaleco radiactivo, ni en los restaurantes cinco estrellas del turismo rural.
ResponderEliminarSilencio, soledad, premodernidad: condiciones para la hierofanía.
Tamarón,has hecho bien recordándonos en el último enlace (con la entrada sobre la Adoración de Botticelli) que este se recreó en pintar la planta que llamamos ombligo de Venus y los italianos llaman ombelico di Venere.
ResponderEliminarPero lo hizo en el portal de Belén, no en el nacimiento de Venus...Felix culpa!
Al ver el cuadro se me va la mente más a la propia Venus que a su ombligo o a la plabra, seguramente por lo que acabo de leer de Borges sobre Swedenborg. Swedenborg dice que en la tierra el matrimonio nunca es perfecto,porque en el hombre prima el entendimiento, y en la mujer, la voluntad. Yo añadiria, actualizando a don Manuel Swedenborg, que si, que la voluntad, pero de hierro. Luego termina con una nota de esperanza: En el estado celestial,el hombre y la mujer que se han querido formaranun solo ángel.En fin, que de la planta me he ido por las ramas. ¡Y que espléndido otoño nos han regalado!
ResponderEliminar"To the Puritan all things are impure".
ResponderEliminarBotticelli no lo era.
Ni su affmo
Sapir-Whorf